Conocedor del mercado del café y emprendedor por naturaleza, Rui Nabeiro decidió en 1961 crear su propia marca de café. En el pueblo alentejano de Campo Maior, en un pequeño almacén de 50 metros cuadrados y sin grandes recursos, se inicia la actividad con tan solo dos bolas de asar de 30 kg de capacidad.
La relación entre Delta y sus clientes es idéntica a la del mostrador y su cliente cada mañana: aprendieron juntos a confiar y compartir la vida en el sabor y aroma de una taza de café.